miércoles, septiembre 01, 2010

Dime de dónde vienes y te diré parte de quien eres…

Mis Padres se separaron por que El la acusaba de que vivía en su mundo de sueños y fantasías y no hacía nada para echar hacia delante en la vida.

Pasado el denso y pesado tiempo, mi Padre ha fuerza de muchas batallas y sacrificio ha logrado tener todo cuanto desde Niño deseaba...

En cambio mi Madre, con una vida serena y calmada, ha logrado Ser Feliz...

Olv. Lemuría.

La realidad.

Justo el día en el que a las 3:00 Pm subiría a cielo, 
a rendir cuentas a Anubis sobre como utilice los talentos 
que recibí antes de mi nacimiento, 
descubrí con un sobresalto 
que durante tantos y tantos años 
agote mis horas 
profundamente durmiendo…

Olv. Lemuria 

viernes, agosto 27, 2010

La Iluminada.

Todo comenzó con velitas aromáticas o como ellos le llaman, incienso.

Retraído, poco expresivo y encerrado en sí mismo, como siempre había sido, que de repente iniciara a experimentar con tan extraños aromas (si así se le puede llamar) era totalmente inquietante; pero cuando nombres de libros paganos fueron espacios en los rincones de su habitación y una nunca antes vista férrea determinación a no faltar a sus “clases de los sábados”, estalló en mi una abrasiva ola de incertidumbres y emociones que me embestían como presagiando la más terrible de las derrotas.

No valieron mis solemnes acciones y tácticas para acercarlos a personas civilizadas y de buen porte a clubs de beneficencia, catecúmenos, carismáticos, aficionados al deporte, caza, autos, tecnología; ya todo estaba perdido.

¿Que vendría ahora?, ¿Se iría de la casa para morir en algún acto sectario bajo los asquean tés efectos del veneno de su gurú y el arsénico? ¿Escupir y bailar desnudo sobre todas las santas tradiciones que han forjado el nombre de nuestra prominente familia?

Pero lo que nunca jamás me esperaría, es que luego de haberlo merecidamente castigado por un mes, en honor a su nuevo corte al estilo del más estridente monje tibetano; se parara frente a mí, con unos ojos inundados de inocencia, y me obsequiara una escultura nacida de sus manos (captaba en ella la esencia de un bello y resplandeciente bebecito, adornado con sus cabellos y esculpido a imagen y semejanza de mi foto favorita de cuando era un recién nacido) y con un tierno, conmovedor y amoroso abrazo me dijera, ¡Te quiero mama!

Admito que en ese instante algo se ilumino dentro de mi Corazón.

Olv. Lemuría.

lunes, febrero 22, 2010

Cuento escrito detrás de los códigos de un Google Document.

Mientras el último episodio de Héroes se cargaba en series yonkies, quemaba un DVD con las películas que vería el fin de semana con sus amigos, hablaba con 16 personas en el Messenger, 18 en Google Talk, 15 en Facebook, comentaba el estado de sus contactos, leía el Reader y Twitiaba todo lo que estaba haciendo, se preguntaba, Como se entretenían en los tiempos de Abraham? Su olvidada Voz interna le respondía, Hablaban cara a cara con Dios.

Olv. Lemuría.

lunes, enero 11, 2010

VII Preludio a canción a mi Sacerdotisa XI.

Sueltan amarras en mi ojo del centro,
suavemente se deslizan
a medida que es inflado
el inmenso e inmaculado lienzo,
describen las piruetas de los obstáculos,
trascienden los pensamientos,
se alimentan con Mana
cosechado en el cielo.
Encallan en tu pecho.

La paloma celebra de júbilo
el corto regreso…
las buenas nuevas
alzan los vítores
del puerto.
La Gran Luz celebra
que a cada instante,
el océano que nos separa,
se hace más y más pequeño.

Olv. Lemuría